Como aspirante a jueza de Distrito, presento una visión clara y comprometida para transformar el sistema judicial desde adentro, con acciones concretas:

MIS PROPUESTAS DE MEJORA

• Un tribunal eficiente y eficaz: Aprovechar al máximo los recursos disponibles para alcanzar metas, trabajando organizadamente y promoviendo una cultura de mejora continua día con día.
• Fortalecimiento de la capacitación judicial: Actualización continua que no solo se enfoque en formar colaboradores expertos en la materia, sino también, en sensibilizarlos sobre la importancia de una gestión adecuada de los recursos, tiempos y procedimientos; ello, fortaleciendo sus habilidades en gestión administrativa, liderazgo y eficiencia operativa, permitiendo brindar un servicio capacitado, profesional y sensible a las necesidades de todos los usuarios.
• Uso de las herramientas digitales: Para reducir tiempos de espera, mejorar la transparencia y facilitar el acceso a la información en tiempo real para todas las partes involucradas en los juicios.
• Transparencia y rendición de cuentas como pilares fundamentales: Para recuperar la confianza ciudadana en el sistema de justicia, garantizando procesos claros, resoluciones accesibles y comprensibles para todas las personas.
• Espacio de confianza: Un entorno donde los ciudadanos puedan expresar sus inquietudes, quejas o sugerencias de forma directa, con la certeza de ser escuchados y atendidos con respeto, sensibilidad y compromiso humano.

Todo lo descrito, con el firme compromiso de actuar siempre con sensibilidad, profesionalismo ético, imparcialidad y objetividad, respetando los derechos humanos y siendo un verdadero instrumento de diálogo, justicia y equidad.

Estoy convencida de que podemos avanzar hacia una justicia más cercana, humana y eficaz para todas y todos los mexicanos.

¿POR QUÉ SOY SERVIDORA PÚBLICA?

Porque el servicio público no es solo un trabajo, es la oportunidad de marcar la diferencia, defender los derechos de quienes lo necesitan y construir un futuro más justo.

Desde siempre, he creído que la vocación de servicio es el camino más noble para transformar realidades y devolver a la sociedad un poco de lo mucho que nos ha dado, por ello ocupar un cargo público es un honor.

Soy una mujer comprometida con la justicia, la verdad y el bienestar de los demás, mi formación como abogada me ha enseñado que la ley debe ser una herramienta de equidad y no un obstáculo, y que quienes tenemos el conocimiento y la posibilidad de actuar, también tenemos la obligación de hacerlo.

MI VISIÓN DE LA FUNCION JURISDICCIONAL.

Mi visión de la función jurisdiccional se basa en que el derecho, cuando se ejerce de manera adecuada, se convierte en una herramienta poderosa al servicio del bien común, con el firme compromiso de contribuir a la construcción de un sistema de justicia más accesible, confiable y humano.

La función jurisdiccional es una labor que no solo implica la aplicación de la ley, sino también la búsqueda constante de justicia, equidad y paz social.

Para mí, la verdadera esencia de la función jurisdiccional consiste en asegurar que todas las personas tengan acceso a la justicia de manera imparcial, humana y respetando siempre el debido proceso. Por ello, ser parte de esta función no se limita a ocupar un cargo, sino que implica asumir un compromiso genuino con la justicia y la sociedad.

Como abogada y servidora pública, sé que esta función no es solo un ejercicio técnico, sino un compromiso profundo y quienes ejercemos esta responsabilidad, tenemos en nuestras manos no solo expedientes, números o estadísticas, sino la vida, los derechos y la dignidad de las personas.

Por tanto, se debe aplicar la ley con sensibilidad, entendiendo que detrás de cada caso hay una historia de lucha y de esperanza.

Creo firmemente en que el ejercicio del derecho debe dignificar y no transgredir este. Por ello, el servicio público no es un privilegio, sino un compromiso inquebrantable y que quienes tenemos la misión de servir debemos ser generadores de cambio y construir una justicia para todas y todos.

MI VISIÓN DE LA IMPARTICION DE LA JUSTICIA.

Mi visión de la impartición de justicia es la de un sistema que inspire confianza, brinde certeza y refleje los más altos valores de quienes ejercemos la función jurisdiccional.

La labor de jueza no se limita a la aplicación de normas, sino a la garantía de que cada persona reciba lo que le corresponde, con base en el derecho y la equidad, porque la justicia debe ser accesible en igualdad de condiciones, sin distinciones ni privilegios, permitiendo que cada voz sea escuchada y cada causa, valorada con forme a derecho y la sensibilidad que merece.

Porque con cada dictado de sentencia, se reafirma el compromiso de servir con integridad, de garantizar que la justicia no sea una aspiración inalcanzable, sino una realidad palpable para cada ciudadano que acuda a un tribunal.

Una sociedad justa es aquella donde la ley se aplica con equidad, donde la verdad no se nubla y donde los derechos de todas y todos son respetados y garantizados.